Hace un mes en que se llevaron a cabo las elecciones locales que sirvieron para constituir la nueva Corporación, en la que la ausencia de representación de IUMA ocasiona la vuelta al pasado en el Ayuntamiento de Abanilla. Vuelve el rodillo de la derecha a la política de Abanilla.
No me ha sorprendido, pero es muy aleccionador el sentido de los comentarios en redes, una vez confirmado el resultado electoral, de presuntos simpatizantes socialistas y de algunos individuos “adjuntos”, estos últimos fácilmente identificables por el ejercicio persistente de la cobardía y de la mentira, muñidores de la difamación y del odio frente a María Dolores Saurín. Más despreciables si cabe, cuando la anterior ya no está, por mandato popular, no por lo expresado por un indecente arrogante que publicó “por lo menos hemos conseguido echar a ésta”. La gente os reconoce perfectamente por vuestra intrascendencia en la opinión pública, pero también por vuestra demostrada inquina.
Convertisteis a María Dolores Saurín en chivo expiatorio de la mala práctica política de los responsables del partido más votado hace cuatro años y, durante semanas, tras las pasadas elecciones, no habéis dudado en seguir en la persecución rencorosa de quien concurrió para seguir trabajando y que con gran decepción no lo consiguió. Ahora que el lobo asoma la patita, quizás deberíais hacer lo que los sensatos ya estarán haciendo, es decir, pensar en los votantes progresistas de Abanilla, que tienen todo mi respeto y reconocimiento y que apoyaron a la candidatura que perdió las elecciones, derrota producida quizás por la carencia de liderazgo y de convicciones auténticamente socialistas en no pocos de sus miembros. A estos votantes me sumo en la creencia de que es preciso actuar y comportarse para conseguir una mayoría de progreso en el gobierno local.
Pero no creo que los fusileros vayan por ahí, porque los votantes socialistas y el pueblo les importa un bledo, actúan por instinto y conveniencia personales y la necesaria renovación en la agrupación socialista, solo retrasada por la convocatoria de elecciones generales, se la trae al pairo. Algunos ya se han autoexcluido de la sinrazón, porque los “disparos” e intervenciones en las redes estimulan el enfrentamiento y la discordia que están de más en el municipio de Abanilla, pero dudo que como pelotón de fusileros mediáticos que son, estén a la altura. Seguro que si os digo a los malos perdedores ajo y agua me entendéis, ¿no? Pues eso, ajo y agua.
Para concluir dos cosas:
Me disculpo ante un gran periodista, porque quizás no pueda mantener la coherencia de su inolvidable “la bajeza moral no se comenta, simplemente se desprecia”
Y por último; decir que me sumo al mensaje de María Dolores para que el alcalde reelegido y su equipo de gobierno lo sea de todos, que no olvide que superó a su rival sin llegar al 50% de los votos emitidos; y añado además, mi deseo de que el trabajo de los concejales de la oposición les dignifique ante las personas que les han legitimado.
Luis M. Álvarez Redondo
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